El domingo es azul, luminoso y, si caminas, de agradable temperatura. Me he pegado una buena paliza por la ruta urbana de Bertamirans, a primera hora y llegué a una conclusión: la gente se levanta tan temprano porque le obligan sus vástagos mas pequeños y sus canes, ansiosos por corretear el parque y disfrutar de esta esplendidez invernal. El único solitario, poco antes de que den las diez, es un servidor, que no resiste a la tentación de unos churros, eso sí, con café, que el chocolate engorda y ya no estamos para ganar peso.

El caso es que solo dos probos empleados municipales están poniendo las calles y hablando entre ellos de futbol y de guerra. De futbol porque ya no saben cuando es la copa y cuando se juega la liga. De guerra porque oyeron en la tele que, por el momento, no hay acuerdo entre rusos y americanos. Como todos por aquí y sin mucha información están pensando que, si los que gobiernan este mundo se ponen a guerrear, las batallas nos conducirán a la ruina total. A todos, que ya me contaréis si con un 6’5 de inflación está España para mandar aviones de caza a Bulgaria y fragatas al Mar Negro.

Si tuviera unos cuantos años menos, me pondría el traje de hippie y me sentaría a tocar con la armónica que me regaló Tonhito de Poi, el “Give peace a chance” de John Lennon ante la embajada americana y luego haría lo mismo ante la rusa. Aunque, si te paras a pensar, millones de personas pidieron en los setenta la paz cantando ese himno y… desgraciadamente los guerreros gobernantes siguieron metiéndonos en sus guerras. Así que no se me ocurre otra cosa mejor que pedir a Toro Sentado, el que tomó el Capitolio, que secuestre a los que nos quieren meter en el lío y los invite a jugar al paintball, que a lo mejor tirándose bolitas que manchan, se calman.

XERARDO RODRÍGUEZ, director de "GALICIA ÚNICA"