Sol, temperatura alta a mediodía y cientos de atletas veteranos de un sin fin de países, forman parte estos días del paisaje urbano de Braga, junto a la belleza de sus cuidados jardines, algo a lo que ya nos tienen habituados. 

La explosión de color y flores, anuncia una primavera adelantada, cuando aún febrero no se ha ido. La vieja y eterna Brácara Augusta luce así, ahora que el sol ha vuelto, tras los días grises y de lluvias de la pasada semana.

El reportaje gráfico, como siempre, es de Araújo Maceira. Disfruten de este paseo por Braga florida, colorida, acogedora y hermosa siempre.