La indignación de los mayores con los bancos es cada día mayor, sobre todo porque hay paisanos que viven ahora aislados económicamente, pendientes de que llegue a sus pueblos una “sucursal móvil” que han montado en un autobús. En toda Galicia el número de sucursales se redujo un 48% en la última década, de 2.373 pasaron a 1.232. Una cabronada sin precedentes en el país. Ourense perdió 187 oficinas, Pontevedra 396, A Coruña 435 y Lugo 123. Los bancos tienen planeado el cierre de más sucursales y el Banco de España se lo va a permitir. Pero que vayan pensando en el viejo refrán: “la avaricia rompe el saco”.
Ya lo decía mi amigo Churruca “para sair o mar hai que saber navegar” y poco expertos debían de ser los tripulantes de una embarcación de recreo que se quedó “sin gobierno” en medio de la ría de Arousa, cuando ya había anochecido. Menos mal que alguno era inteligente y se le ocurrió hacer señales de luces con los móviles. La respuesta se la dieron miembros de Protección Civil de Vilanova que los pudo localizar con este sistema y los remolcó a puerto, cuando ya se veían pasando la noche en vela.
XERARDO RODRÍGUEZ, director de "GALICIA ÚNICA"