Los ricos también se mueren...


www.rbtribuna.com - RBTRIBUNA 
+ Texto : Xerardo RODRÍGUEZ -
+ Fotos : "Galicia Única" - 
Pulsar sobre cada imagen que quieran ver a mayor tamaño.

Uno de los grandes placeres de mis días de abuelo es la ducha. Podría pasarme el día bajo el agua templada disfrutando de las gotas que se deslizan por mi cuerpo… de la cabeza a los pies. Sí aún encima entra el sol por la ventana y me saliniza, como decía aquel mi profesor de Filosofía, el goce es tan intenso que tiene que venir Gloria a rescatarme…

—- ¡Te van a salir escamas!

Pero, qué quieres que te diga. A estas alturas de la vida cada uno tiene sus manías y la mía es el agua que cauteriza los males óseos de un cuerpo gastado. Por eso amo los paisajes de río y también los de mar. Así gasto solemnemente mi tiempo en las ribeiras bonitas o mojando estos pies que me hinchan en la ola que se deshace en la arena de la playa.

LOS RICOS TAMBIÉN SE MUEREN

Te digo que no le tengas envidia a los ricos. Para nada. Mientras Forbes publicaba hoy la lista de los que más dinero tienen en toda España yo recordaba los monumentales panteones del cementerio de Pereiró, en Vigo, y los apellidos ilustres que figuraban en las lápidas, la mayoría pertenecientes a la aristocracia de la sardina, ingeniosa manera que tenían los vigueses del siglo pasado para definir a los pijos de la época.

—- ¡Hay huesos de mucho rico de dios en ese camposanto…!

Hoy en día, la mitad de los cien más ricos de España son como mínimo septuagenarios y no llegarán a tiempo para gastar su fortuna. Sus herederos se encargarán de derrocharla gozando de los más caros placeres de la vida, como hacen los nietos de alguna gente muy conocida que cría malvas en los cementerios gallegos. Puede que a alguno… ni siquiera les hayan puesto flores ayer sus jovenzuelos herederos y a no ser que tuviese en vida a alguna amiga amante se estará preguntando desde el Mas Allá como es que los hijos de su difunta criada, la señora María, han llenado su humilde sepultura de flores de todo tipo y en la suya nadie depositó una mísera dalia.

Lo grave no es que se hayan muerto ricos, no. Es que nunca supieron apreciar la verdadera fortuna de nuestro deambular por este mundo y solo pensaron en acumular sus riquezas. Jamás se detuvieron a pensar en la gozada de una buena ducha cuando el sol entra por la ventana para regalarte su vitamina B, esa que ellos compran en la farmacia.

Si quieres saber quién es más rico en España busca la lista Forbes en Google, pero te anticipo que son los de siempre: los cien que figuran en ella poseen 130.505 millones de euros y los cinco primeros tienen 72.600 millones de euros, es decir, el 55% de la riqueza española. Los que menos dinero tienen de esa lista son los cinco hermanos Masaveu con 225 millones cada uno, que no es poco. El que más, ya lo conoces de sobra, vive en A Coruña.


Artículo Anterior Artículo Siguiente