www.rbtribuna.com - RBTRIBUNA + Texto : Xerardo RODRÍGUEZ - + Fotos : Galicia Única -
NO HAY VALLE SIN RÍO NI ALDEA SIN VALLE
Dos mares abrieron el horizonte a otros mundos y siete caminos milenarios vertebraron el territorio, de cumbres suaves y valles profundos, organizado en torno a mil ríos. Así es la Tierra que habitamos: Luminosa, por la confusión que la luz crea entre el cielo y el agua. Fantástica por sus espacios de leyenda. Hermosa por naturaleza. Dulce por la canción de los árboles. Y noble por las huellas de la vieja estirpe.
Encerrado en mi propio país, hoy me cansé del hogar y allá me fui, otra vez, a dar los mismos pasos de la última década, saludando a la gente…
—- Ola, bós días.
—- Bós días nos dé Dios.
Me sobra con que me salude al paso la gente única, esa que es de mi especial afecto por las vivencias que transmite. Y sigo para que la escena se repita en la próxima parada. Estoy en mi valle.
Se abre a la calma de la vieja aldea donde hasta el tiempo se detiene para descansar, mientras el río remueve el paisaje para procurarnos los brillos de las mañanas de oro. Este valle se extiende poco más allá del espacio urbano y el río llega desde el monte próximo, tras superar el vértigo de la cascada. En Galicia, no hay valle sin río ni aldea sin valle, que reverdece cuando la bruma mansa empapa la tierra.