UN PAÍS ENFERMO DE EGOÍSMO
Los datos de las viviendas vacías en España bien dicen de cómo ha cambiado esta sociedad que, a pesar de ser la nuestra, nos gusta a todos tan poco. Entre los grandes problemas sociales que se denuncian están, de una parte la falta de viviendas para las clases menos favorecidas y de la otra los abusivos precios de los alquileres, que han subido una barbaridad en relación con la congelación de los salarios y el empleo basura que está ofreciendo el mercado laboral.
El testimonio de la más reciente encuesta nos facilita una cifra alarmante para Galicia: se han detectado 300 mil viviendas desocupadas. Sus propietarios prefieren mantenerlas vacías antes de ponerlas en el mercado, lo que supone una pérdida anual para ellos de 2.000 millones que, está claro, no necesitan.
Las razones que te dan es que tienen que hacer reformas y no pueden. Que no se sienten seguros por la cuestión jurídica ante los problemas que puedan surgir con los inquilinos. Incluso te dicen que prefieren tener la propiedad como mera inversión cara al futuro.
La realidad es que sobran casas y pisos pero faltan viviendas, lo que viene a decirnos que el desequilibrio de esta sociedad a la que no hace mucho llamábamos de bienestar es brutal. Habitamos un país enfermo de egoísmo.
PARAÍSO
No me extraña que la gente se pirre por Galicia aunque el anticiclón de las Azores se haya vuelto medio loco. Este otoño que te permite andar de manga corta, sin temperaturas agobiantes, solo puedes vivirlo aquí. Es el tiempo ideal para disfrutar intensamente de la naturaleza y descubrir esos pequeños paraísos ocultos, como hicieron Hyde Lotter y June Byrne.
Él es sudafricano, piloto, buceador y buen surfista. Ella es irlandesa, amante de lo rural y de la historia de los pueblos. Se casaron en Estados Unidos en donde vivían hasta que descubrieron Coubeira, un lugar medio oculto pero bellísimo del municipio de Mondoñedo que figura en el triste censo de pueblos abandonados.
Llegaron a Galicia y se enamoraron de la Tierra Única. Así explican el porqué:
—- La comida, la amabilidad y la cortesía, la asequibilidad de las propiedades, las infraestructuras que incluyen buenas carreteras y aeropuertos, una población que vive cerca de la naturaleza y la tierra… Galicia se convirtió en una opción extremadamente atractiva para nosotros.
Buscaron y encontraron Coubeira, donde ya han iniciado la construcción de un proyecto de ecoturismo. Aunque en realidad Hayde asegura…
—– Estamos construyendo nuestro propio paraíso.
La historia de June y Hyde no es nueva para mí, que bien sé que en el rural gallego se hablan numerosos idiomas, pero sí me extraña la poca iniciativa de mis paisanos pudientes, incapaces de ver su futuro en estos lugares abandonados hoy tan próximos a la vida urbana.
Estoy seguro de que llegará un momento en el que habremos vendido lo sustancial del país: las aldeas de nuestros abuelos.
—– Pero hablaréis varios idiomas.
—– Eso sí.
Xerardo Rodríguez