BOICOT A OSEIRA El Hermano Luís denuncia: —- Desconocemos quien lo hace, pero se está boicoteando el albergue del Monasterio. Nuestras sospe...
BOICOT A OSEIRA
El Hermano Luís denuncia:
—- Desconocemos quien lo hace, pero se está boicoteando el albergue del Monasterio. Nuestras sospechas se centran en algunos negocios interesados en que los peregrinos elijan la Ruta por Piñor…
Resulta que este año pernoctó en el Monasterio de Oseira un veinte por ciento menos de peregrinos que el año pasado y los monjes lo achacan a que alguien los está desviando en Cea, haciendo mala publicidad del magnífico albergue que ofrecen.
Lo cierto es que yo recuerdo la lucha que mantuvieron los de Piñor y los de Cea por conseguir la autenticidad xacobea de ambas rutas y conviene aclarar que la Vía de la Plata es la marcada por Piñor. Por Oseira pasa el Camino Real que no es senda de peregrinos sino un desvío de diez kilómetros.
Pero para contentar a todos, la Xunta de Galicia, en el Xacobeo 2010, señalizó como válidos ambos tramos y desde entonces la confusión está servida incluso para quienes conocemos bien este itinerario.
Yo recomiendo a los peregrinos, a pesar de todo, que elijan el camino de Oseira porque se encontrarán paisajes mucho más atractivos e interesantes que por Piñor y además tendrán la oportunidad de conocer El Escorial Gallego, como definió Otero Pedrayo a una de las joyas monásticas más destacadas de España.
AGUAS MILAGROSAS
En el Ourense de los ríos bonitos las aguas milagrosas fluyen de la tierra más amada, siempre como termas, justo al lado de un curso fluvial. Las más famosas por su publicitación turística son las de O Tinteiro y las de A Chavasqueira, conocidas hasta por mis nietos que acuden a ellas incluso en invierno.
Sin embargo, mi abuela gustaba del agua para beber del antiguo balneario de As Caldas, al que llamaba “Baixo a Ponte”. Estaba situado entre las torres de O Pino, a las que algunos llaman aún “la pareja de la Guardia Civil” por su tejado en forma de tricornio, y las orillas del Miño que, como sabes, llega con fama a la ciudad, pero tras haber bebido toda el agua del Sil.
Ahí acompañaba a mi abuela, como te decía y ya era testigo a finales de los cincuenta de como tomar esas aguas e incluso llevarlas embotelladas para casa, era todo un ritual. Decían por aquel entonces que eran buenísimas para la piel, aunque otros te contaban que eran muy eficientes para la gingivitis y enfermedades de la boca. Mi abuela las tomaba para la flebitis y a mí me las hacía beber porque tosía mucho.
Leyendo el periódico me enteré esta mañana que seguían confiando en estas aguas no solo los ourensanos, sino gentes que acuden al antiguo balneario de As Caldas desde otras partes de Galicia, convencidas de sus poderes y de sus milagros.
CON RETRANCA
Xaquín Marín es uno de los genios de la retranca, género humorístico exclusivamente gallego. Nos ha regalado esta magnífica reflexión política…
Xerardo Rodríguez