Otros dos apuntes de Xerardo Rodríguez cuando un nuevo día amanece...

OTRA VEZ PISANDO LAS CALLES


Ese mismo día, mi gente volvió a tomar las calles de Santiago de Compostela en defensa de la Sanidad pública, porque hay políticos en nuestro país muy dados a la privatización de todo. Y no se lo vamos a consentir. Seguiremos apoyando con todas nuestras fuerzas a nuestros sanitarios para que el gobierno dote a los centros de salud y a los hospitales públicos de los medios y del personal necesarios para evitar las largas esperas que estamos padeciendo en la actualidad. ¡Hemos de evitar el deterioro del Servicio Galego de Saúde!
Hubo mas protestas, el domingo pasado, en toda España: millones de personas reclamaron en 45 ciudades soluciones para el problema de la vivienda, a la que solo pueden acceder los muy pudientes, dado el alto precio de los alquileres y los de venta. El colectivo de propietarios de inmuebles, en su mayor parte, lo componen los especuladores y los fondos buitres. El mercado inmobiliario está en manos de un avaricioso 5% del total de la población y el 87% de las hipotecas que conceden los bancos son a inversores con dos o más propiedades.
Así que, presidente Sánchez y ministros del gobierno, tenéis que arreglar esto porque es la mayor preocupación que tenemos los españoles. Otro día ya hablaremos del rearme, pero hoy ocuparos de subir los impuestos a los buitres para acabar con su negocio antes de que ellos acaben con nosotros.

RAJOY, ESE GRAN PREGONERO

Rajoy no pasará a la historia por su quehacer al frente del gobierno español, pero los periodistas hemos de reconocer que sí da mucho juego informativo. En sus discursos y declaraciones públicas, incluso ahora que está apartado de la primera línea política, siempre deja una perla. La Cofradía de la Veracruz de O Carballiño le invitó a pronunciar el pregón de la Semana Santa, pero él habló de fútbol, de “lo bien que lo está haciendo el Arenteiro en 1ª Federación, clasificado por encima del Celta Fortuna y del Barcelona Atlético del que le separa una distancia sideral”. ¡Toma ya!
Se justificó diciendo…
—- Yo nunca pronuncié un pregón de Semana Santa y es algo a lo que, como católico, le doy toda la importancia que tiene; y nunca pronuncié ningún pregón ni de Semana Santa ni de cualquier otro asunto en O Carballiño, donde a lo máximo que llegué fue a dar algún mitin partidario.
Tal vez por ello dedicó casi todo el tiempo a hablar de la Festa do Pulpo, del monumento a la pulpeira, de la carne ao caldeiro, de las cañas fritas, del parque municipal y hasta del monasterio de Oseira enclavado en el ayuntamiento vecino de Cea. También habló de los emigrantes, “de lo que fueron capaces de lograr con mucho esfuerzo y trabajo”, sin olvidar a la Pardo Bazán “que vivió y escribió” en la villa, ni a los carballineses, “gente legal, amable y generosa”.
Al final, dedicó unos minutos a ensalzar a la Cofradía de la Veracruz y a su Semana Santa. Solo le faltó hablar del vino…
¡Un fenómeno, Rajoy! ¡El sumun de la intelectualidad gallega! Aún hoy no me explico cómo llegó a inquilino de la Moncloa…

Xerardo Rodríguez / "Galicia Única"