Es puente vacacional en España para los pudientes. Disfrutar de sábado, domingo, lunes y martes seguidos es lujo que no está al alcance de todos, pero si de no pocos. Entre ellos, los que disponen de algún dinero para hacer turismo aprovechando lo de los 4 días...

Miles de gallegos han desfilado ya desde el viernes tarde hacia Portugal como lugar favorito para estos días de descanso. No hace falta, a estas alturas, explicar por qué tantos gallegos prefieren Portugal... Están teniendo, además, suerte con el estado del Tiempo y van a disfrutar de interesantísimas ofertas turísticas.

Dentro de Galicia, para los foráneos del territorio galaico, hay un punto de destino estos días para miles y miles de gentes, no solo españoles, también de otras partes del Mundo. Es Santiago de Compostela... indudablemente, la catedral, la tumba de Santiago Apóstol, el Año Santo, las incesantes peregrinaciones. 

Este sábado decidimos irnos a Santiago para ver in situ, qué sucedía en el primer día del "puente del Pilar". Primer día y... más que palpable invasión de foráneos. De todas partes de España y numerosísimos extranjeros, de muy diferentes países; mayoría, eso sí, de hermanos portugueses, a los que -no obstante- no deberíamos de contabilizar como extranjeros... a decir verdad.

Pero Santiago, su casco antíguo, era este sábado, en el inicio del "puente" una explosión de numerosísimas gentes de todas las edades, aspectos, procedencias, idiomas... hasta antiguos integrantes de Tunas universitarias de toda España y Portugal tenían allí una especie de "convención" aprovechando estas fechas... Peregrinaciones varias, una de ellas desde Costa Rica con numerosos participantes; un sacerdote joven con "cleriman" grababa un video en plena plaza del Obradoiro, con la catedral de fondo, para transmitir a su pais que "hemos llegado muy enocionados y a punto estamos de entrar a abrazar al Apóstol Santiago"...

Peregrinos de todas las edades, de esos que se mortifican haciendo uno de los múltiples caminos de Santiago... a pie, o en bicicleta... cientos y cientos llegaban en esta jornada a Compostela. Cuando paramos en Padrón para degustar los churros con chocolate que despachan a las puertas del Mercado de Abastos los sábados, ya vimos docenas y docenas de peregrinos -mayoría de ellos portugueses- que avanzaban camino de A Escravitude, O Faramello, Osebe y... finalmente Santiago. Unos aún llegarían este sábado a la caída del día, otros lo dejarían para hacer los últimos tres o cuatro kilómetros en este domingo...

Santiago, este sábado, casi reventaba por las costuras. Una avalancha como tal vez no contaban los hosteleros aunque estos soñaban con algo así. No había mesas libres a las dos, dos y media de la tarde, para comer en las calles, en la zona monumental. El gentío era desbordante... La mayoría iban con máscara, todo hay que decirlo, calle arriba, calle abajo, mientras los de las tunas alegraban sentados en cualquier terraza entonando y ensayando sus canciones y preparándose para el recital del anochecer en el auditorio de Abanca.

Como si no hubiese pandemia... el turismo vuelve con fuerza. Y Santiago, su Año Santo, lo acusa y para bien. La plaza del Obradoiro es el punto de encuentro, de concentración de todos los turistas. Y ahora más que nunca, porque la limpieza, mejora, reconstrucción de todas las fechadas y elementos ornamentales de la catedral es ya al 90% casi un hecho... y se ve una catedral única, como no recordábamos ni los más viejos del lugar... es un aspecto sensacional, grandioso, impactante, maravilloso, formidable... esos calificativos salían de las bocas de esos miles de turistas, en medio de los cuales tomamos notas, pusimos oídos a lo que decían, arrimamos posiciones para poder traer ahora, también, este reportaje gráfico hasta ustedes.

En RBTRIBUNA tenemos la suerte de poder contar con los reportajes gráficos que periòdicamente nos ofrece ARAÚJO MACEIRA. El de este sábado, en Santiago, es el testimonio visual de una sinfonía de gentes, procedencias dispares, vestimentas de todo tipo, protagonismos en no pocos casos excéntricos, manifestaciones de alegría y júbilo en muchos de ellos por haber culminado el camino; en otros por compartir -simplemente- un viaje -en coche o autobús de cientos de kilómetros- con amigas y amigos y aprovechar el dichoso puente del Pilar "para ver al Apóstol y ganar la indulgencia plenaria". Colas interminables y permanentes para entrar en la catedral, igualmente para acceder a la puerta santa; guardia jurado que espabila al que se entretiene más de los segundos prudenciales ante la tumba del Apóstol... Todo mecánico, todo organizado, todo desbordante, porque la respuesta del gentío turístico y religioso, así lo ha querido ya mismo, pese a la pandemia, ya en este inicio de octubre en Compostela.

El "puente del Pilar" supone la vuelta por todo lo alto de miles de turistas y peregrinos a Santiago. Este sábado lo hemos comprobado in situ. Y estas imágenes de ARAÚJO MACEIRA dan buena fe de ello. Muchas, de excelente calidad, hablan por si solas. ¿Protagonistas? : quienes este sábado a Santiago acudieron desde toda España y diversos países del Mundo para encarnar, entre otras cosas, lo que el potente objetivo captó y la máquina Canon registró...

Quédense ahora con estas 115 imágenes y disfruten :